LA PAZ, 6 nov (Xinhua) — La expresidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez (2019-2020), recuperó hoy jueves su libertad, tras cuatro años y ocho meses de reclusión en el penal de Miraflores, en la ciudad de La Paz, luego de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) anuló la sentencia de 10 años de cárcel por un supuesto golpe de Estado. Áñez salió del centro penitenciario alrededor de las 11:00 hora local (15:00 GMT) acompañada de familiares, abogados y simpatizantes políticos. Afirmó emocionada y al borde del llanto que su liberación “es volver a la vida”, al sostener no estar arrepentida de haber asumido la Presidencia durante la crisis política de 2019. La sentencia 011/2025 emitida el 5 de noviembre establece que la exmandataria no debió ser juzgada por un tribunal ordinario, sino mediante un juicio de responsabilidades, mecanismo previsto para expresidentes. De acuerdo con la resolución, la sucesión presidencial de 2019 no constituyó una usurpación de funciones, sino un proceso “constitucional”, ante el vacío de poder por renuncias en cadena en la cúpula del Ejecutivo y el Legislativo de Bolivia. El entorno cercano de la también exsenadora dio a conocer que la política tiene previsto asistir el próximo sábado 8 de noviembre a la ceremonia de toma de posesión del presidente electo, Rodrigo Paz, así como del vicepresidente Edmand Lara, programada en la Asamblea Legislativa. Áñez fue detenida en marzo de 2021 acusada de asumir la Presidencia sin respetar la línea de sucesión constitucional, luego de la dimisión del exmandatario, Evo Morales (2006-2019). Aunque enfrentó cerca de una decena de procesos vinculados a su gestión presidencial interina, la política fue sentenciada por una segunda acusación de supuesto golpe de Estado, que la mantuvo tras las rejas. La decisión del TSJ se produce en un contexto de revisión de procesos judiciales abiertos por los hechos políticos de 2019, acciones que ya han beneficiado a otros dirigentes opositores como Luis Fernando Camacho y Marco Pumari. Aunque Áñez ya ha recobrado su libertad, aún deberá enfrentar otras acusaciones en procesos judiciales como su presunta responsabilidad en la violación de derechos humanos por operativos de seguridad durante su mandato presidencial. Fin