SAO PAULO, 22 sep (Xinhua) — El juez Alexandre de Moraes, del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil, afirmó este lunes que el Poder Judicial “no aceptará coerción ni abrirá espacio para la impunidad” tras la decisión del Gobierno estadounidense de imponer sanciones financieras contra su esposa, Viviane Barci de Moraes.
“La aplicación ilegal y lamentable de la Ley Magnitsky a mi esposa no solo contrasta con la historia de Estados Unidos, del respeto a la ley y a los derechos fundamentales, sino que también viola el derecho internacional, la soberanía de Brasil y la independencia del Poder Judicial”, señaló Moraes en un comunicado.
El magistrado fue el instructor en la corte del juicio por el cual fue condenado el 11 de septiembre pasado el expresidente brasileño Jair Bolsonaro (2019-2022), un proceso que también generó sanciones en su contra, como la aplicación de la Ley Magnitsky que de hecho son impedimentos ante el sistema financiero global.
“La independencia judicial, el coraje institucional y la defensa de la soberanía nacional forman parte del universo republicano de los jueces brasileños, que no aceptarán coerción ni obstrucción en el ejercicio de su mimisión constitucional”, dice la nota.
La Corte Suprema también se pronunció, afirmando que las sanciones contra Viviane Barci de Moraes son “injustas y se basan en relatos falsos”. Además, destacó que el proceso judicial que derivó en la condena de Bolsonaro respetó el debido proceso y la plena defensa.
Otros magistrados de la alta corte expresaron apoyo a Moraes como Gilmar Mendes y Flávio Dino.
El Gobierno de Donald Trump incluyó a Viviane Barci de Moraes y a un estudio de abogados de su familia en la lista de sancionados, ordenando la congelación de activos en territorio estadounidense y la prohibición de transacciones en dólares.
Además, el Departamento de Estado de EE. UU. anticipó nuevas restricciones de visas a funcionarios brasileños vinculados a los procesos contra Bolsonaro.