Todas las entradas de: Dr. Leonel Argüello Yrigoyen

Mitos sobre la COVID-19 que debemos aclarar

La vacuna controlará la epidemia de la COVID-19: no la controlará hasta que se alcance a vacunar al 80% de la población y aún no llegamos al 3% y con una sola dosis, hasta que tengamos dos dosis, un mes después, estaremos protegidos contra la forma grave de la enfermedad, y recordemos que no todo el que se vacuna está protegido, por lo que es importante continuar con las medidas de prevención.

 Ya en Nicaragua tenemos inmunidad de rebaño: ningún país la tiene, además es muy difícil ya que la COVID-19 se repite y además las nuevas variantes del virus podrán infectarte, aunque ya te enfermaste antes.

Mitos sobre covid-19

Aquí estamos en molote y nada nos pasa: claro que sí, mucha gente queda contagiada, lo que pasa es que el 80% de los niños y el 45% de los adultos no presentan síntoma o malestares, pero entre el 35% al 70% pueden tres meses después presentar daños o secuelas que afectan el cerebro, corazón, pulmones, riñones y otros, disminuyendo la calidad y expectativa de vida, esto ya lo vemos en Nicaragua en varios casos. Estamos sembrando el virus y cosecharemos enfermos, complicados, muertos y dañados.

En los buses no nos pasa nada: ahí tenés mucho riesgo de contagiarte, primero porque el chofer, ayudante y pasajeros entran sin mascarilla, las ventanas no están abiertas por lo tanto no está ventilado, nadie se lava las manos 40 segundos con agua y jabón ni con alcohol gel, entonces las superficies están contaminadas, la gente se sienta y está de pie totalmente pegados sin guardar la distancia de al menos 2 metros entre persona y persona, tenemos ahí todas las condiciones similar a estar en molotes.

En Costa Rica pasa, pero aquí no: aquí sí nos pasa, lo que sucede es que no se comparte ni es pública la información, lo que tenés es una campaña y lo ves en las autoridades nacionales y municipales que disminuyen el impacto de la epidemia y la politiza diciendo que es alarmista, la prevención es lo correcto, el mundo lo ha demostrado y en Nicaragua tenemos que aprender, si no aceptamos que estamos en epidemia se disminuye falsamente el riesgo y la gente no toma las medidas de prevención, se enferma y contagia a otros con la consecuente disminución de tu salud.

Yo tomo tratamiento preventivo: este no existe, si usted está tomando algo le están mintiendo, ni la ivermectina, ni la hidroxicloroquina ni ningún otro medicamento químico ni natural le sirve. Y recuerde automedicarse es un error, va en contra de su salud.

No es mi responsabilidad: claro que sí, es responsabilidad individual, familiar, comunitaria y gubernamental. Si yo me cuido te cuido a vos, a mi familia y a mi comunidad. Si yo no envío a mi hija enferma a la escuela o a la universidad, estoy protegiendo a los otros estudiantes y docentes. Si yo no participo en molotes me cuido a mí y a los demás, controlo mi salud. Recuerde que usted tiene el poder de producir salud o diseminar enfermedades, seamos responsables y exijamos que todos y todas lo sean.

Consejos para vacunarse contra la Covid-19

Como todo en la vida, es importante estar informado para tomar decisiones adecuadas, lo felicito porque sé que se va a vacunar, así que permítame darle unos sencillos pero importantes consejos.

Antes que se vacune, debe ir debidamente desayunado o almorzado, bien hidratado, con ropa floja, camisa fácil de subir la manga, haber tomado sus pastillas si es paciente crónico, visitar el lugar de vacunación acompañado, para que lo cuiden, orine antes, vaya con calma y con mucha paciencia, lleve al menos dos mascarillas descartables o de tela de 3 capas, si no se siente seguro puede usar, para mayor protección la N95, KN95 o bien póngase la mascarilla quirúrgica descartable y arriba de ella la de tela de 3 capas. Lleve agua para tomar y para lavarse las manos, con un pedazo de jabón y su toallita de manos o alcohol gel. Lleve papel higiénico y un abanico de mano. No es necesario que tome previamente ningún medicamento por si acaso le da una reacción. Si usted está con fiebre o con la COVID19 no asista pues no lo vacunaran y sería un peligro para el resto de la gente ya que podría contagiar a muchos.

Durante la vacunación, intente estar al menos 2 metros de distancia con la otra persona, busque la sombra, averigüe dónde quedan los baños en caso lo necesite, siga las instrucciones del personal que lo atiende, pida que le anoten en un papel su presión arterial y guárdela bien, si su presión arterial no es cercana a 120/80 vaya a la unidad de salud para que se la tomen diario y anoten fecha y hora durante una semana. Le harán firmar un documento, que no lo obliga a usted a nada, no se preocupe, le enseñaran el frasco en el MINSA y le aplicarán la vacuna, luego lo llevarán a un asiento y esperará media hora, sea disciplinado, no se vaya antes, esto es una medida de precaución por si le da alergia u otro síntoma. Si siente algo raro dígaselo al personal de salud en ese momento y pida un número en caso de que presente reacciones posteriores a la vacuna.

Después de la vacunación, si siente algo que no es normal en usted, avise al MINSA si le dieron donde llamar o llame al 132, si presenta dolores de cabeza, fiebre, dolor en el cuerpo, ardor en la garganta, tome un par de tabletas de Acetaminofen con un vaso entero de agua. Estos síntomas no deben durar más de dos días, si continua asista a una unidad de salud en ese momento o luego si usted siente algo que no había sentido antes.

Todas estas son medidas de prevención, recuerde que antes y después de ser vacunado, con la primera y la segunda dosis, usted deberá continuar con las medidas de prevención de 5 +1 (estar al menos a 3 brazos de distancia de las otras personas para no respirar el virus, no tocarse ojos, nariz ni boca porque por ahí puede entrar también el virus, lavarse las manos con agua y jabón por al menos 40 segundos para destruir al coronavirus, usar mascarilla si sale y careta facial para ponerle barreras de entrada y salida y estar siempre en lugares ventilados, donde se lleve al microbio o se diluya y exista una menor carga viral, evite aglomeraciones y molotes. La prevención está en sus manos, recuerde que esta enfermedad deja daños permanentes meses después de padecerla, protéjase y proteja a los demás con estas medidas básicas de higiene.

¿Cómo vamos con la vacuna contra la Covid-19?

La salud se ha vuelto en el último año un tema de conversación cotidiano, ojalá esto nos ayude a promoverla con estilos de vida más saludables, comer más vegetales y frutas, hacer ejercicio, aumentar la recreación sana que nos disminuya el estrés y fortalecer las medidas higiénicas que prevengan enfermedades, así como ser más riguroso en el cuido de nuestra salud y la de los demás.

Esta pandemia ha incrementado el esfuerzo físico y mental del trabajador de la salud, en nuestro país se han enfermado al menos 800 y fallecido 119, cifra que por supuesto es menor que la realidad. Lo lamentable es que la mayoría son muertes evitables si se hubiesen tomado las medidas de prevención y asegurado los equipos de protección básicos, fuimos el único país donde más bien se prohibió por las autoridades gubernamentales auto protegerse.

Investigaciones reflejan que el personal sanitario tiene 7 veces más riesgo de contagiarse por la característica de su entorno laboral, mayor concentración de virus, menor distanciamiento físico, poca ventilación, mucho contacto entre ellos y con los pacientes, tiempos prolongados de exposición, insuficiente equipo de protección y muy poca educación sobre la peor enfermedad que hemos tenido en más de 100 años.

También tenemos que recordar que un médico atiende un promedio de 50 pacientes al día, y que los mismos están en sala de espera donde también pueden contagiarse al igual que en los flujos de pacientes donde no se respeta el distanciamiento físico.

Imagínese con la jornada de vacunación, miles de trabajadores visitan casas y vacunan personas sin tomar las medidas de prevención, así que además del riesgo que corren también son transmisores del coronavirus, por ello y por todo lo expuesto anteriormente, en el mundo, se prioriza vacunar primero al trabajador de salud, el gobierno de Nicaragua hace caso omiso de esta recomendación, además no reconoce el esfuerzo de las y los trabajadores de salud nicas.

Por tanto vale la pena este pequeño artículo donde se brindan argumentos de porque sí vacunar al trabajador de salud, no se desatiende a quien va a cuidar de tu vida en tiempos de pandemia, es enterrarte de antemano, hay tiempo aún para que las autoridades de salud rectifiquen.

¿Cómo cuidarme mis riñones?

10% de la población mundial está afectada por enfermedad renal crónica, quiere decir que en Nicaragua habrían más de medio millón de personas enfermas del riñón, lo cual va creciendo progresivamente cada año, por eso vale la pena que usted se cuide y no llegue al punto que requiera un tratamiento con diálisis, que le limpia la sangre o un trasplante de riñón. En América latina tenemos la tasa de mortalidad por enfermedad renal crónica más alta en el mundo y es la segunda causa más importante de años de vida perdidos por un latino. Además, muchos necesitan tratamiento y no lo reciben. Por eso cuidarse de no padecer de diabetes, presión alta, obesidad y consumo de medicamentos no recetados, es importante para evitar que sus riñones le fallen y orines poco, se inflamen tus pies, presentes náuseas, vómitos, confusión, ansiedad, fatiga y duermas mucho.

Ser diagnosticado con enfermedad renal es un gran desafío para el paciente y para las personas que lo rodean. Su diagnóstico y manejo, particularmente en las etapas avanzadas de la enfermedad renal, impacta severamente en sus vidas al reducir su capacidad y la de sus familiares y amigos para participar en actividades cotidianas como el trabajo, viajar y socializar, además, causa numerosos efectos secundarios problemáticos, como fatiga, dolor, depresión, deterioro de la memoria, problemas gastrointestinales y dificultades para dormir. 

Es importante identificar y manejar los síntomas que causan sufrimiento, como dolor, problemas de sueño, ansiedad, depresión, estrés, movilidad, fragilidad y otros, por lo que es importante recibir más educación y estrategias de manejo para aliviar estos síntomas, de modo que los pacientes y sus cuidadores puedan tener una mejor calidad de vida relacionada con la salud.

En Nicaragua nos falta la investigación, identificar mejor qué es lo que pasa, cómo podemos prevenirlo y ver cómo mejorar la práctica y las políticas públicas, el gobierno debe facilitar el acceso, apoyo, establecer la confianza y promover el control en el autocuidado, para que el paciente viva bien, mantenga su rol y funcionamiento social, controle su salud y bienestar, estando permanentemente motivado para convertirse en participante activo de su tratamiento con el apoyo de su familia. 

Para cuidarse los dos riñones que nos sirven para producir la orina, remover los desperdicios y el líquido en exceso del cuerpo, controlar el balance químico y la presión arterial, mantener tus huesos sanos y ayudar a producir glóbulos rojos, es importante cumplir con las 8 Reglas de Oro: mantenerse en forma y activo, controlarse regularmente los niveles de glucosa en sangre, monitorear tu presión arterial, comer saludablemente y mantener tu peso bajo control, acostumbrarse a tener una ingesta de líquidos saludables, no fumar, no  automedicarse y revisarse la función renal. 

Si ya estás afectado de tus riñones hay que tener aceptación, auto disciplina especialmente con la medicación y el auto cuido, confianza que podrás salir adelante a pesar de lo que te cambiará tu rutina, mantener el control de tu vida, comer saludable más que rico y mantenerte ocupado, ayudar a otros, siempre trabajando por tu salud con tu médico. Vive tu vida con la pasión de cada día.

Agotamiento de padres y cuidadores durante la pandemia

Para los padres y madres de familia les ha sido difícil lidiar con sus hijos e hijas en esta pandemia del COVID-19, el peso de la educación y desempeñar el papel de docente en casa, enfrentar sus temores, llenarse de más paciencia, dedicarles más tiempo, el estrés y agotamiento se suman a la ya pesada situación del país.

Es importante que, como adultos, identifiquemos los signos de alerta de fatiga pandémica o sea que estamos tremendamente agotados. Por ejemplo, preguntémonos: nos mantenemos  en constante estado de alerta sobre si me contagio o se contagian mis hijos, nos sentimos muy estresados, no le vemos el fin a esta crisis que aumenta la angustia e incertidumbre, nos agobia no poder salir a todos lados, abrazar, pasear, no podemos disfrutar, nos sentimos triste o con sentido de culpabilidad, nuestro nivel de tolerancia es bajísimo, sentimos irritabilidad e incluso un aumento de la agresividad que se traduce en que gritamos a los hijos constantemente y los tratamos mal, problemas del sueño, conflictos de pareja, inclusive ideas suicidas, debemos reconocer que requerimos ayuda y buscarla es lo más inteligente, puede conectarse a través del WhatsApp al número +505 81992571 y le brindará el Comité Científico Multidisciplinario consulta psicológica gratuita.

Los padres debemos priorizar nuestro autocuidado y hacer todo lo posible para generar formas saludables de lidiar con el estrés y la ansiedad, ya que los hijos e hijas lo sienten y reaccionan. A veces se portan mal y no nos damos cuenta de que es para llamarnos continuamente la atención porque así lo logran más fácilmente. Dediquemos un poco de tiempo a encontrar y ofrecer alternativas para sacarlos de ese círculo vicioso y elogiemos su éxito. A veces hay que ignorar esa conducta, siempre que no estén haciendo algo peligroso. Respire, meta aire y sáquelo despacio. Hay que recordarles lo que hicieron mal de forma breve, recomiendan que los apartes y estén en un solo lugar durante un minuto por cada año de edad. Compartamos con otros padres, de repente salen más ideas, recárguese, ríase, pasee y busque lo que le gusta.

Recordemos que las dificultades forman parte de la vida, negar a los niños esta realidad es incorrecto, además los adultos somos el ejemplo que van a seguir y ellos se fijan en cómo respondemos a las diferentes situaciones. Debemos ver el estrés como una oportunidad que desarrolla nuevas capacidades como la creatividad o aprender a pedir ayuda, que lamentablemente llegamos a viejos sin pedirla, lo cual es un grave error. 

Algunas recomendaciones serían: 1-identifique y hable sobre los temores de sus hijos, ustedes son fuente de seguridad, física y emocional para ellos, contéstele de manera simple y honesta, dele tiempo para que expresen sus sentimientos, avísele que se cuidará cuando salga, ellos también velan por usted. 2-Establezca rutinas, horarios de actividades escolares, tareas de casa, recreativas, ejercicio físico o contacto virtual con los amigos, defina normas o comportamientos y cuáles puede o no tolerar y que sepan las consecuencias de que no las cumplan, así como valore, aprecie, reconozca y recompense cuando hagan algo correcto. El descanso debe ser a la misma hora, recuerde están en casa, pero no de vacaciones. 3-es fundamental comprender las necesidades de sus hijos e hijas para poder responder adecuadamente. Hay que hacerles sentir que sus preocupaciones y temores nos importan y no tienen nada de malo, pruebe a decir te quiero con más frecuencia.

¿Por qué el personal de salud debe vacunarse primero con la vacuna contra la Covid-19 ?

La salud se ha vuelto en el último año un tema de conversación cotidiano, ojalá esto nos ayude a promoverla con estilos de vida más saludables, comer más vegetales y frutas, hacer ejercicio, aumentar la recreación sana que nos disminuya el estrés y fortalecer las medidas higiénicas que prevengan enfermedades, así como ser más riguroso en el cuido de nuestra salud y la de los demás.

Esta pandemia ha incrementado el esfuerzo físico y mental del trabajador de la salud, en nuestro país se han enfermado al menos 800 y fallecido 119, cifra que por supuesto es menor que la realidad. Lo lamentable es que la mayoría son muertes evitables si se hubiesen tomado las medidas de prevención y asegurado los equipos de protección básicos, fuimos lamentablemente el único país donde más bien se prohibió por las autoridades gubernamentales auto protegerse.

Investigaciones reflejan que el personal sanitario tiene 7 veces más riesgo de contagiarse por la característica de su entorno laboral, mayor concentración de virus, menor distanciamiento físico, poca ventilación, mucho contacto entre ellos y con los pacientes, tiempos prolongados de exposición, insuficiente equipo de protección y muy poca educación sobre la peor enfermedad que hemos tenido en más de 100 años.

También tenemos que recordar que un médico atiende un promedio de 50 pacientes al día, y éstos se ubican en sala de espera de las unidades de salud, donde también pueden contagiarse al igual que en los flujos de pacientes donde no se respeta el distanciamiento físico.

Imagínese con la jornada de vacunación, miles de trabajadores visitan casas y vacunan personas sin tomar las medidas de prevención, así que además del riesgo que corren también son transmisores del coronavirus, por ello y por todo lo expuesto anteriormente, en el mundo, se prioriza vacunar primero al trabajador de salud, sin embargo, el gobierno de Nicaragua hace caso omiso de esta recomendación, además de no reconocer el esfuerzo de las y los trabajadores de salud nicas.

Por tanto, vale la pena este pequeño artículo donde se brindan argumentos de porque sí vacunar al trabajador de salud primero, además no se desatiende a quien va a cuidar de tu vida en tiempos de pandemia, es enterrarte de antemano, todavía hay tiempo para que las autoridades de salud rectifiquen.