QUITO, 16 jun (Xinhua) — El Gobierno de Ecuador descartó hoy lunes racionamiento de energía eléctrica durante 2025, en momentos en que el país se prepara para entrar en la época de estiaje que generalmente transcurre entre junio y septiembre. “Descartar la posibilidad de que existan apagones en el Ecuador, incluso en los momentos de estiaje en los próximos meses (…) las acciones estratégicas, concretas y planificadas del Gobierno nos permiten afirmar que se está mirando hacia el futuro para que Ecuador tenga energía renovable y alternativas”, dijo la portavoz de la Presidencia, Carolina Jaramillo, en su habitual rueda de prensa semanal. Precisó que dichas decisiones incluyen un plan para enfrentar el estiaje y la modernización del Sistema Nacional de Transmisión, después de que el año pasado Ecuador enfrentó una grave crisis energética causada por una sequía severa. La vocera del Gobierno detalló que hasta terminar 2025, el país contará con 979,5 megavatios (MW) y estará garantizada la provisión nacional de energía. Apuntó en ese sentido que se trata de “energía firme que no depende del clima”, tras detallar que parte de esa energía se ha recuperado, rentado y rescatado. Añadió que para 2026, se incorporarán al Sistema Nacional Interconectado 403 MW y en 2027 otros 600 MW para totalizar 1.982,5 MW, lo que “permitirá garantizar el suministro de energía y contar con reservas adecuadas”. Jaramillo añadió que la modernización del Sistema Nacional de Transmisión también es un tema “clave para tener la soberanía energética, mejorar la calidad del servicio y tener interconexión con Perú”. Los anuncios del Gobierno se realizan previo a la llegada de la época seca en Ecuador, país que en el segundo semestre de 2024 experimentó cortes de luz de hasta 14 horas diarias, debido a una grave crisis energética atribuida a la peor sequía en 60 años. La falta de lluvias afectó entonces la generación de energía en las centrales hidroeléctricas, que normalmente abastecen gran parte del país. Los apagones afectaron también a hogares, comercios e industrias, lo que provocó significativas pérdidas económicas.